La primera vez que la descubrí fue en unos de esos cortes “no publicitarios” de TVE, donde promocionaban el ciclo “Los jueves de Cine clásico de la 1” . El spot consistía en una escogida superposición de planos, pertenecientes a películas míticas de la historia del cine, acompañados con una magnética melodía de fondo. Así comenzó mi historia con Lana del Rey y con su álbum “Born to die”. Eso fue amor a primera vista o más bien “amor a primer oído”.
En menos de un año Elizabeth Grant se convirtió en Lana del Rey, odiada y amada a partes iguales. El origen de su nombre artístico está en la unión del nombre de la actriz Lana Turner y del coche Ford del Rey.
Elvis Presley y Frank Sinatra son su inspiración a nivel vocal, pero a la hora de contar historias sus referentes son Bob Dylan, y sobre todo Kurt Cobain del que dice lo siguiente “Cuando tenía 11 años vi a Kurt Cobain cantando ‘Heart-Shaped Box’ en MTV y quedé paralizada. Era la persona más hermosa que había visto. Incluso tan joven, fui capaz de relacionarla con su tristeza”.
Y fue precisamente “Heart Shapped Box” la canción que versionó en un concierto en Sidney (Australia), la que provocó la ira de la viuda del líder de Nirvana, Courney Love. El cover de Lana del Rey no debió de gustarle demasiado si tenemos en cuenta los comentarios que publicó en su perfil de Twitter “¿Sabías que esa canción habla de mi vagina? “La próxima vez que cantes ese tema, espero que pienses en eso”
Y es que, desde que irrumpió en el panorama actual, nada en ella consigue pasar desapercibido, su presencia ha ido más allá del ámbito puramente musical. Ese aspecto de diva vintage de los sesenta, mezla entre Nancy Sinatra y muñeca de porcelana, ha logrado crear estilo. Basta con fijarse en las ultimas tendencias de moda, para ver como sus cardados imposibles que desafían la ley de la gravedad, ocupan las pasarelas y las portadas de las revistas más prestigiosas de medio mundo. Los fabricantes de laca están frotándose las manos, desde que Lana se ha convertido en toda una “it girl”. El influyente diseñador Karl Lagerdfeld, el mismo que llamó gorda a Adele, salió en defensa de los voluptuosos labios de la cantante . La marca Mulberry lanzó el bolso Del Rey inspirado en ella misma y fue la encargada de cantar en el show privado de Louis Vuitton en Shangai.
Muchos la acusan de ser un producto prefabricado, un invento de la industria publicitaria. Sin embargo, la única capaz de fabricar y destruir a Lana del Rey, es Lizzy Grant. Basta con fijarse en las letras de sus canciones ,escritas en primera persona, para darse cuenta de que son fragmentos de su propia vida. Ella es la protagonistas de sus historias. Sin ir más lejos “Video Games” habla de un día cualquiera en el que lo único que deseaba era quedarse en casa con su novio jugando a videojuegos. Así habló en una entrevista de esta relación:
“Creo que nos juntamos porque ambos éramos unos marginados. Fue perfecto. Sin embargo, pienso que con la satisfacción también viene la tristeza. Esa vida tenía algo de sublime – íbamos al trabajo y él jugaba con sus videojuegos – pero tal vez todo era demasiado predecible. En esa época estaba perdiendo la ilusión de ser una cantante y me hacia muy feliz vivir con un novio que amaba, pero al final, ambos perdimos de vista nuestros sueños. Quizás la vida doméstica no sea realmente algo tan especial”
Lo mismo ocurre con “Summertime Sadness”, que “no es más que una referencia a la tristeza que a veces te da el verano”. La presencia de un tono trágico de aflicción y añoranza, es algo recurrente en la mayoría de sus temas. La propia Lana ha confirmado, que cuando se sienta a escribir lo hace con aire melancólico, y que su inspiración no son las relaciones trágicas, aunque así pueda parecer, sino las relaciones intensas.
El fenómeno Lana del Rey no se entendería sin la era internet. El vídeo musical de la canción “Video Games” que la catapultó a la fama fue dirigido por la propia Lana, y gracias a la red, y a portales como YouTube su éxito creció como la espuma. Todo el mundo empezó a preguntarse quién era aquella joven con aire naíf, voz envolvente y labios exageradamente abultados. Fue por aquel entonces, cuando la famosa serie estadounidense “Gossip girl” incluyó su tema en una escena crucial entre los dos protagonistas, Chuck y Blair, lo que ayudó también a su camino hacia el triunfo.
Después del fulgurante éxito de “Video Games”, llegó “Born to die” está vez ya con un videoclip de alta producción y con una estética bastante grotesca, que muchos comparan con un anuncio de perfume francés. Se puede ver a una Lana entronizada cual reina, rodeada de flores y escoltada por dos hermosos tigres. Posteriormente vieron la luz “Blue Jeans” y “Summertime Sadness” . Y cuando parecía que Lana quería permanecer una temporada al margen, a finales de verano llega el bombazo. En la apertura de su página web aparecía el controvertido videoclip de National Anthem. En él la artista se mete en la piel de la sensual Marilyn Monroe y de la sofisticada Jackie Kennedy. Sólo ella puede tener la osadía de ser amante y esposa a la vez, y de convertir a Kennedy en un presidente negro, encarnado por el rapero A$AP Rocky. El clip tiene una duración de 7:40 minutos y los colores recuerdan a los de los films de los 60. También puede encontrarse una cierta similitud con la película “Zapruder” al reflejar el momento exacto del asesinato del presidente Kennedy.
Los detractores de la artista veían premonitorio el título de su álbum, sobre todo tras su desastrosa actuación en el prestigioso programa americano Saturday Night Live, que muchos calificaron como la peor de la historia del programa. Sin embargo, desgraciadamente para ellos, van a tener Lana del Rey para rato. Ni siquiera las malas críticas han conseguido mermar su fama, sino más bien todo lo contrario. Véase su fichaje para la campaña otoñal de la prestigiosa firma sueca de moda low cost , H&M, donde la cantante hipnotiza con la versión del clásico Blue Velvet de Bobby Vinto, interpretado con su peculiar estilo parado y nostálgico. Las marcas son conscientes del poder mediático de la artista y de su don de convertir en oro todo lo que toca. Jaguar ha sido la última marca en percatarse de su tirón, y ha decidido ficharla como imagen de la campaña publicitaria de su nuevo coche, el F-type.
Supongo que como todos, Lana del Rey ha nacido para morir, pero también lo ha hecho para triunfar.